sábado, 21 de octubre de 2023

8. La escuela en casa 

        Tras visionar el reportaje sobre esta práctica docente que siguen algunas familias de forma muy minoritaria, me siguen quedando dudas. La principal, y más importante, es sí cumplen con dar una buena educación. ¿Y qué entender como educación? Me vuelvo a fijar en lo que nos dice Nélida Zaitegi: la Educación de manera sintética es hacer buenas personas, buenos ciudadanos y buenos profesionales (sí, ya sé que estoy un poco pesadito con ella, dadme tiempo para leer a otros maestros y pedagogos). Hagamos pues el checklist de la definición de homeschooling, ya puestos a usar anglicanismos:


        ¿Permite el homeschooling formar buenas personas? En principio, podríamos pensar que para la adquisición de valores morales podría ser suficiente el ejemplo de los padres y el entorno más próximo. Pero ¿con quién va a testar el alumno estos nuevos conocimientos, estas capacidades? Sus compañeros de clases extraescolares, o los niños que se va a encontrar en el parque junto a su domicilio no son una muestra válida de la sociedad, son un entorno demasiado protegido y controlado; no es fácil entrar en conflicto de valores. Vygotsky defiende que poner al alumnado a pensar juntos les va a dar muchas herramientas para construir un pensamiento autónomo, pero se necesita ese contacto social entre iguales previo.


        ¿Permite el homeschooling formar buenos ciudadanos? Seguro que educar en casa nos permite aprender valores cívicos, pero siendo este tipo de enseñanza “per se” elitista, ¿Se preocupará de crear una sociedad más justa y solidaria, o de perpetuar los privilegios de quien se los puedan pagar?


        ¿Permite el homeschooling formar buenos profesionales? En este aspecto tengo menos dudas, creo que toda la parte académica se puede lograr mediante un aprendizaje tutorado o autoaprendizaje. El problema viene en lograr las llamadas competencias blandas; algunas se pueden ver beneficiadas por el aprendizaje en casa pero otras serán más difíciles de adquirir:

  • Favorecidas: resolución de problemas, aprender a aprender, pensamiento creativo, pensamiento crítico, responsabilidad o adaptabilidad.
  • Desfavorecidas: trabajo grupal, liderazgo, corresponsabilidad, colaboración, aprender a convivir o comunicación efectiva.




(Nélida Zaitegi, pedagoga. Versión Completa. Educación para la convivencia y resolución de conflictos)
https://www.bbvaaprendemosjuntos.com/es.

2 comentarios:

  1. Hola, Carlos! muy interesante el post. ¿Si hubieras tenido la oportunidad de estudiar en casa, lo habrías hecho?
    Un saludo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Por desgracia durante mi niñez sufrí largos periodos de reposo absoluto en cama por unas fiebres reumáticas y seguía el curso gracias a la ayuda mis padres que son docentes. Recuerdo leer muchísimos libros infantiles y eso me encantaba, pero yo quería estar en clase, notaba que cada vez que volvía me había desvinculado del grupo o el grupo de mí. No, no me parece sano lo de estudiar en casa. ¡Gracias Lía por comentar!

      Eliminar

  Último post (de momento)           Quería aprovechar la oportunidad que tenemos de colgar dos posts de temática libre para dejaros una r...